Indervalle rindió homenaje al periodista Augusto López

En el lanzamiento del programa “Soy Valle, Oro Puro”, la gobernadora Dilian Francisca Toro y la gerente de Indervalle, Clara Luz Roldán, rindieron un sentido homenaje al periodista deportivo Augusto López, quien falleció en las últimas horas en la capital del Valle del Cauca.

Con un minuto de silencio y una resolución póstuma, el deporte vallecaucano rindió honores a López, quien en el pasado hizo parte de Indervalle y la Junta de Deportes del Valle, sirviendo como referente del periodismo deportivo en la ciudad y el departamento.

Semblanza de Augusto López Vásquez

Nació en Armenia el 4 de julio de 1947, desde muy pequeño fue traído a Buga donde estudió la primaria en el Colegio José María Cabal y el bachillerato en el Académico.

Se inició en 1970 en el Combo Deportivo de Caracol y estuvo en el cubrimiento de los Juegos Panamericanos de 1971, miembro de ACORD Valle desde 1976, ocupando varios cargos en la Junta Directiva.

Como redactor deportivo laboró en el periódico El Pueblo 1976, El Caleño, corresponsal del El Tiempo 1975 y en el 79 estuvo en el Siglo en Bogotá. Regreso a Cali al periódico Occidente en el año 83, luego pasó al El País, entre 1983 y 1988.

Fue jefe de Prensa de la Junta de Deportes del Valle en 1987 y periodista de INDERVALLE en el año 2008.

Además oficio como jefe de prensa del Centroamericano de Atletismo de Cali en 1993. Suramericano de Voleibol 1996, Panamericano de Lucha 1992, Vuelta de la Juventud Colombiana en 1983 y coordinador técnico de Comunicaciones de la Universidad del Valle en 1996.

Estuvo en el cubrimiento de todos los eventos internacionales celebrados en Cali entre 1971 y 1989 y de los Juegos Departamentales del Valle desde Sevilla 1976 hasta Palmira 2015.

Se destacó por ser un periodista de fina pluma, especialmente en las crónicas con deportistas de extracto humilde. Con una gran visión del deporte aficionado, se atrevió a pronosticar el triunfo de Albeiro García Tierradentro en el mundial infantil de Lucha, un mes antes de su viaje a Estocolmo en una crónica para el periódico El Pueblo.

Amante del deporte aficionado, conocedor como el que más de todas las disciplinas, seguidor acérrimo de los seleccionados del fútbol Vallecaucano, el ciclismo, el softbol y  el béisbol, donde ofició  además como speaker oficial de varios torneos fueron su gran pasión.

Historiador, pues se jactaba de conocer en profundidad los secretos de jugadores y entrenadores. Amigo de sus amigos, defensor a muerte de los dirigentes y un buen conversador. Tocaba los temas con altura y le gustaba la polémica. Controvertía con argumentos.